Aurelio
Casto, centurión de la VI Legión Victoriosa, es un hombre
corpulento, parco en palabras, inculto y aficionado a los burdeles.
También es un soldado eficiente y un líder duro y severo, de esos
que acatan las órdenes de sus superiores sin chistar y espera que
las suyas sean atendidas de la misma forma. No pierde el tiempo en
debates internos ni posee un pasado trágico ni un peligroso enemigo
mortal que lo sigue allá donde va. Es, simplemente, un curtido
centurión de las legiones de Roma. Y el protagonista de la novela.
Y
esto es un punto a favor, ya que se aleja del arquetipo de héroe
perfecto, culto, de pasado complicado, perseguido por sus fantasmas.
Para nada. Casto es un hombre de su época, con sus peculiaridades,
pero parece un buen reflejo de lo que debía ser un oficial de bajo
rango de las legiones en los primeros años del siglo IV e.c.
La novela se distancia de otras épocas tan re-visitadas
como las Guerras Púnicas o los tiempos gloriosos de los siglos I y
II. Estamos en un siglo turbulento, donde la estructura y
equipamiento de las legiones ha cambiado y aun sigue transformándose en un Imperio está azotado por tensiones sucesorias y guerras
civiles.
Pues
bien, estacionado en Britania junto a la legión, es elegido para que
sus hombres escolten a dos emisarios hacia el norte, más allá de
las ruinas del Muro de Antonino, para reunirse con los líderes del
pueblo de los pictos, ya que hay rumores de que se está gestando una
revuelta contra Roma y el Augusto Constancio ha decidido tomar cartas
en el asunto. Si fuera necesario cruzaría el mar junto a las
legiones y, acompañado por su hijo Constantino -tribuno de
caballería- haría frente a los bárbaros. Pronto, nuestro
protagonista se dará cuenta de que hay muchos intereses cruzados en
las negociaciones y de que abundan los conspiradores en la sombra en
uno y otro bando, por lo que el alzamiento picto quizás sea
inevitable y las tierras de Britania se vean castigadas por la guerra
una vez más.
Legionarios de comienzos del siglo IV, por Seán Ó'Brógáin |
Tiene buen
pulso y la duración justa, nunca llegando a aburrir en sus 400
páginas. Como ya habréis podido adivinar, es una novela de carácter
militar pero tienen también unas pizcas de intriga y política que
dan un buen toque al conjunto. Debo decir que ha sido una pequeña
sorpresa, ya que estaba bastante escéptico ante lo que pudiera
encontrarme. ¿Sería algo tan manido como las novelas de Ben Kane,
con un tono demasiado juvenil y que parecía más sacado de las
novelas de fantasía de los 90 que de la novela histórica seria?
¿Quizás estaría bien escrita pero sería aburrida como “Martyrium:
El ocaso de
Roma”, ambientada
en estos mismos años?
Pues resulta
que la novela
funciona y cumple, entretiene y nos sumerge en el ambiente de la
Britania del siglo III y de los legionarios de la época. Sin ser un
dechado de virtudes, el estilo del autor es resultón y acompaña
perfectamente a la narración y al personaje. Me parece también un acierto que, aunque siendo una novela militar, nos presente la guerra como algo sucio, cruel y despiadado, lejos de idealizaciones y conceptos como el honor y la gloria del combate, usados sólo para motivar a los soldados que luego se enfrentan a la cruda y brutal realidad del conflicto armado.
De
hecho, tuvo gran éxito en Reino Unido, donde ya se ha publicado un
segundo volumen y el año próximo verá la luz un tercero,
convirtiendo así esta obra en una saga militar, aunque
esta aquí reseñada es una historia prácticamente autoconclusa.
Dentro
de lo negativo, indicar que el texto publicado habría agradecido una
última corrección o revisado, habiéndome encontrado algunas
erratas aquí y allá, tales como palabras mal escritas, géneros
cambiados, o expresiones como “en tiempos de Trabajo” en lugar de
“en tiempos de Trajano”. Esto afea un producto que creo
está por encima de
la media dentro del mundo de novelas militares romanas.
Eso
sí, se agradece que
la portada muestre un yelmo de la época y no nos coloquen los
legionarios con armaduras de bandas, sin importar si la novela está
ambientada en el siglo III a.e.c. o en el V e.c.
Esperaré con interés a
ver si las continuaciones mantienen el tipo o ya se pierden en la
necesidad de escribir y publicar rápidamente, pero al menos este
título ha servido para llamar mi atención. Sólo espero que para la
siguiente cuiden un poco más el texto en español.
Sobre el autor: "Ian James Ross lleva una década investigando y escribiendo sobre la última época del Imperio romano. Pasó un año en Italia impartiendo clases de inglés y en la actualidad vive en Bath, Inglaterra."
Título:
La guerra en el fin del mundo
Autor: Ian Ross
Editorial: La esfera de los libros (2015)
Páginas: 420
Autor: Ian Ross
Editorial: La esfera de los libros (2015)
Páginas: 420
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.